jueves, 13 de julio de 2017

El Ministerio del Tiempo (Serie).


En los tiempos que vivimos, donde a las televisiones les da desde hace ya una buena tirada de años por poner morralla y realities espantosos con sus versiones innumerables y patéticos personajes, hay que rebuscar mucho para encontrar cosas buenas, y en el mundo de las series y concretamente de las españolas (que no sean la eterna Cuéntame) eso es más complicado aún, pero hace dos años apareció un oasis en el desierto, una gloriosa serie llamada El Ministerio del Tiempo. Dicha serie se emite en la 1 de TVE, cuando al ente público le place, ya que empezó siendo emitida los lunes, luego la han colocado los jueves para sustituir a Cuéntame, y cuando vuelvan después del parón veraniego a saber donde la ponen. Está creada por los hermanos Pablo y Javier Olivares y está producida por Onza Partners y Cliffhanger.


Su primera temporada se estrenó el 24 de febrero de 2015, la segunda el 25 de febrero de 2016 y la tercera (actualmente en emisión) el 1 de junio de este 2017, y que justo hoy han decidido partir los responsables de el canal público en dos, y emitir los seis capítulos restantes después del estío, contando esta última con un mayor presupuesto gracias a un acuerdo con Netflix, lo que ha permitido rodar más exteriores y tener mejoras en la producción, osea la gloria.
El argumento principal de la serie gira en viajes a través del tiempo, con la intención de que la historia no cambie y siga su curso natural. El Ministerio en si, es una institución gubernamental secreta dependiente de La Presidencia del Gobierno español, por lo que solo monarcas, presidentes y un número reducido y exclusivo de personas saben de su existencia. El paso hacia otras épocas, se realiza a través de puertas vigiladas por las patrullas del propio ministerio, cuyas misiones serán impedir que cualquier intruso del pasado llegue al presente o al revés, con el fin de cambiar la historia para su beneficio, lo que alteraría la realidad actual. Los agentes del ministerio son personas de diferentes épocas como Rodolfo Sancho (Julián), Aura Garrido (Amelia), Nacho Fresneda (Alonso) o Hugo Silva (Pacino), mientras sus superiores son Juan Gea (Ernesto) y Cayetana Guillén Cuervo (Irene), quienes rinden cuentas al subsecretario Jaime Blanch (Salvador) cuya secretaria es Francesca Piñón (Angustias).


Pero diréis, ¿qué es lo que hace tan especial a esta serie? Pues vamos por partes como dijo Jack El Destripador, primero y para mi la clave, los guiones son fantásticos, incluso se han hecho guiones exclusivos para capítulos, y están hilados de manera perfecta. Segundo las interpretaciones son perfectas, e incluso se permiten el lujo de tener alardes cómicos y tercero y no menos importante es muy didáctica, ya que sabiendo distinguir de lo que se está hablando en cada capítulo, y sobre todo saber cual es la historia real, puede servir y de hecho sirve en escuelas como ejemplo gráfico de la existencia de personajes históricos como El Empecinado, Napoleón, Cervantes, Lope de Vega, Gustavo Adolfo Becquer, Francisco de Goya, Pablo Picasso, etc...


Si que es cierto que la serie que mantiene unas audiencias de entre el 10 y el 12% de cuota de pantalla con audiencias medias de dos millones de personas, ha tenido multitud de repercusión en las redes sociales y de hecho hay fanáticos en internet llamados los ministéricos, a los que no tengo el placer de conocer aún. Por si fuera poco en esta tercera temporada se ha activado una aplicación para el móvil que te cuenta secretos de cada capítulo, que para los súper fans es algo maravilloso.
En cuanto a las situaciones peculiares que se producen en la serie, que hay muchas, sobra decir que da muchísimo juego, ya que tener a un agente en el ministerio, como por ejemplo Alonso de Entrerríos, un soldado de los Tercios de Flandes condenado a muerte en 1569 y que es salvado por el Ministerio, un tipo de valores de su época (antiguos), de mucho honor, gran soldado, experto tirador y estratega, que aprende que es la televisión, internet, un pen-drive y comenta con toda tranquilidad que las cosas pueden buscarse en la "red de redes", es algo la mar de divertido.


En homenaje a esta magnífica serie que ojalá siga más temporadas, os dejo con un capítulo 1 de la primera temporada, titulado El tiempo es el que es.

No hay comentarios:

Publicar un comentario